El Estadio Atanasio Girardot se transformará en un volcán de emociones este jueves cuando el Atlético Nacional enfrente al Internacional de Porto Alegre en un partido crucial del Grupo F de la Copa Libertadores. La reciente victoria de Nacional de Uruguay sobre Bahía ha dejado la clasificación más apretada, con Nacional de Uruguay sumando cuatro puntos y Atlético Nacional, con tres, ubicado en el fondo de la tabla.
Los colorados gaúchos de Internacional, con cinco puntos, ocupan el segundo lugar del grupo. Una derrota para el equipo paisa tendría repercusiones significativas, especialmente después de su reciente empate 1-1 ante el DIM, que ha afectado su moral. Sin embargo, la oportunidad de enfrentarse a un rival de gran envergadura como Internacional podría ser el bálsamo necesario para sanar sus heridas.
El técnico Javier Gandolfi confía en que la atmósfera del partido despierte la ilusión en los aficionados. “Espero que cambie la energía que se está viviendo”, fue su mensaje optimista. La historia de Atlético Nacional en competiciones internacionales, incluyendo las coronaciones de 1989 y 2016, sirve como inspiración adicional.
El equipo ha hecho ajustes significativos, incluido el regreso de Marino Hinestroza, quien puede ofrecer un nuevo dinamismo en el ataque. La ofensiva estará fortalecida por jugadores clave como Edwin Cardona y la potencia de Alfredo Morelos, formando un tridente que, si logra cohesión, podría ser decisivo. David Ospina, capitán del equipo, ha manifestado la gravedad del encuentro al calificarlo como una “final” para el equipo.
Por otro lado, Internacional llega al partido con el ánimo afectado tras una derrota 4-2 ante Corinthians, lo que podría haber dejado secuelas en su desempeño. Alan Patrick, su capitán, es una preocupación por molestias musculares, aunque parece probable que participe en el encuentro. La defensa del equipo brasileño ha mostrado vulnerabilidades que Atlético Nacional podría aprovechar para buscar un resultado positivo.
Este encuentro no solo es una oportunidad para Atlético Nacional de mejorar su posición en el grupo, sino también de recobrar la confianza perdida y revitalizar su campaña en la Libertadores. La experiencia de noches pasadas podría servir de estímulo para un triunfo que sería significativo en sus aspiraciones.