Daniel Brizuela, quien fue el descubridor de Franco Mastantuono, comparte su primera impresión sobre el prometedor jugador de fútbol. Según Brizuela, que conoció a Mastantuono cuando tenía solo 9 años en su ciudad natal de Azul, el mediocampista tiene “un guante en el pie y una mira telescópica en el ojo”, lo que explica su destacada precisión y efectividad en el juego.
Brizuela, ex director de Captación de River Plate, dedicó dos años a convencer a los padres de Mastantuono para que se uniera al club, una tarea que confirma su confianza en el talento del joven. Además, Brizuela menciona que la experiencia de Mastantuono en el tenis ha contribuido a su excelente técnica y precisión, lo que es poco común entre los futbolistas de su edad.
Se espera que el jugador siga desarrollándose y que pronto esté listo para unirse a un club europeo, lo que podría ser un paso importante en su carrera. Este enfoque en la formación y la paciencia por parte de River Plate refleja una estrategia a largo plazo que ha producido talentos de renombre en el pasado.
Con el potencial que muestra, Mastantuono podría convertirse en una figura destacada en el fútbol argentino y más allá. Su historia es un recordatorio alentador del talento que puede surgir cuando se brinda el apoyo adecuado a los jóvenes jugadores.