Al menos 13 personas han perdido la vida y 98 han resultado heridas después del descarrilamiento del Tren Interoceánico en Nizanda, Oaxaca, la mañana de este domingo. La Secretaría de Marina ha confirmado que a bordo del tren viajaban 250 personas, de las cuales 241 eran pasajeros y 9 miembros de la tripulación. Entre los heridos, aproximadamente 36 han sido admitidos en hospitales debido a heridas considerables, y cinco se encuentran en estado grave.
El accidente se produjo cuando la máquina principal salió de la vía. El tren, que consiste en dos locomotoras y cuatro vagones, estaba en la Línea Z, que conecta Salina Cruz en Oaxaca con Coatzacoalcos en Veracruz. Esta línea es propiedad del gobierno mexicano y forma parte del proyecto de Corredor Interoceánico, diseñado para revitalizar el transporte ferroviario en el sur del país desde 2023. Esta ruta, inicialmente establecida para el turismo, vincula el océano Pacífico con el golfo de México.
Un pasajero compartió en un video que el tren parecía ir a gran velocidad y se cuestionó si había perdido los frenos. Las imágenes disponibles muestran la mayoría de los vagones fuera de la vía, y se observa que el último vagón, donde se encontraba este pasajero, quedó casi intacto sobre las vías. Otras grabaciones muestran a los pasajeros atrapados en un vagón inclinado, esperando entre llantos la llegada de los equipos de rescate.
Este desafortunado incidente marca el segundo accidente del Tren Interoceánico en una semana. El 20 de diciembre, un tren en la Línea FA que iba de Coatzacoalcos a Pakal-Na, en Chiapas, colisionó con una pipa que trató de cruzar las vías. Afortunadamente, en ese caso no hubo víctimas ni heridos.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, expresó su pesar en redes sociales por la tragicidad del accidente y confirmó que los servicios de emergencia estaban atendiendo a los heridos. Indicó que los afectados están recibiendo atención médica en hospitales del IMSS ubicados en Matías Romero y Salina Cruz, así como en Juchitán e Ixtepec. La Fiscalía General de la República ha iniciado una investigación para esclarecer las causas del descarrilamiento.
A pesar de la tristeza que trae este evento, la pronta respuesta de las autoridades y los servicios de emergencia muestra una capacidad de reacción que podría minimizar las consecuencias ante este tipo de tragedias en el futuro. La implementación de mejoras en la seguridad ferroviaria podría ser un paso necesario para evitar incidentes similares en el camino.