Thomas Tuchel ha declarado que sería un gran logro personal para él si Inglaterra se clasifica para la Copa del Mundo con una victoria sobre Letonia este martes, en lo que queda de la fase de clasificación. Este desafío representa más que una simple prueba para Tuchel y la Federación de Fútbol, ya que la decisión de contratar a un entrenador alemán sin experiencia previa en gestión internacional ha generado ciertas dudas.
La evaluación del desempeño de Tuchel se efectuará sobre la base de los partidos eliminatorios programados para los próximos meses de junio y julio. Si bien se espera que Inglaterra alcance el torneo, también se anticipa que supere cualquier desafío grupal en una Copa del Mundo ampliada que se llevará a cabo en América.
Con los playoffs en marcha, Tuchel se enfrenta a la presión de obtener resultados positivos. Ha tenido éxito en varios clubes, incluyendo la Liga de Campeones y la Supercopa con Chelsea, así como múltiples títulos en la Bundesliga con Bayern y en Ligue 1 con PSG. Esta trayectoria ha sido uno de los motivos que llevaron a la FA a contratarlo, buscando un ganador que lleve a Inglaterra a nuevas alturas.
Tuchel se siente orgulloso de la posibilidad de que Inglaterra asegure su lugar en el Mundial el próximo verano, pero enfatiza que su objetivo primordial es incluir a Inglaterra entre los equipos que peleen por el campeonato mundial. Su misión es clara: “poner una segunda estrella” en la camiseta del equipo.
A pesar de su confianza, Tuchel toma en serio la posibilidad de complacencia. Recuerda la amarga derrota ante Senegal en un amistoso, lo que le sirve como una importante lección sobre la necesidad de mantener la guardia en alto y no subestimar a ningún adversario. La celebración de los jugadores senegaleses después de esa victoria aún resuena en su memoria, recordándole que cada partido debe ser tomado con seriedad.
“Debemos actuar y derrotar a Letonia. Ese es el mandato”, afirmó Tuchel, quien también ha instado a los jugadores que no fueron seleccionados para el último equipo a mostrar “deseo y voluntad” si desean tener la oportunidad de participar en el Mundial.
A pesar de que muchos aficionados confían en que Inglaterra avanza sin problemas en el Grupo K, la historia demuestra que la clasificación nunca está garantizada. Recordando el fallido intento de Steve McClaren en 2007 o la desafortunada eliminación del equipo en 1994, Tuchel enfatiza la necesidad de enfocarse en el presente y jugar al máximo nivel.
“Para mí, lo que importa es cómo nos clasificamos, cómo jugamos y cómo nos presentamos”, comentó Tuchel, vislumbrando un futuro prometedor para su equipo. Con Letonia en el horizonte, la ilusión está en el aire y la ambición es clara, mientras los ingleses buscan reafirmar su lugar en el fútbol mundial.