El 6 de noviembre, el Ministerio de Trabajo anunció el inicio de una investigación sancionatoria contra el Club Deportivo Pereira debido al incumplimiento de una orden emitida anteriormente. Esta acción se produce tras la detección de graves violaciones a la legislación laboral por parte del club, incluyendo demoras en el pago de salarios, no reconocimiento de recargos por trabajo dominical y festivo, así como retrasos en los pagos de primas.
A finales de octubre, el Ministerio había impuesto una medida cautelar que suspendía todas las actividades del club. Sin embargo, a pesar de esta suspensión, las autoridades han observado que el Deportivo Pereira ha ignorado la orden, continuando con entrenamientos y planeando un partido oficial el 7 de noviembre contra el Deportivo Independiente Medellín. Andrés Piedrahita Gutiérrez, director territorial en Risaralda, enfatizó que la desobediencia a la orden ministerial representa el cargo más grave, lo que podría agravar la situación del club.
El Ministerio también ha declarado que la suspensión de labores para los empleados del Deportivo Pereira se mantendrá vigente hasta que se verifique el pago total de las deudas laborales. Este panorama es preocupante para el club, que ya enfrenta serias dificultades financieras y operativas.
La situación del Club Deportivo Pereira marca un momento crítico que pone de relieve la importancia de cumplir con la legislación laboral y la protección de los derechos de los trabajadores. A medida que avanza la investigación, se espera que se tomen decisiones que puedan ayudar a restablecer la normalidad en el club y garantizar el bienestar de sus empleados.