El FC Barcelona se mostró visiblemente molesto con las decisiones arbitrales tras su victoria ante el Girona, pero su encuentro reciente frente al Olympiacos dejó más preguntas que respuestas respecto a la labor del árbitro suizo Urs Schnyder. Aunque el Barcelona se impuso 2-1, la actuación del colegiado generó controversia entre los aficionados y analistas.
El primer gran punto de tensión ocurrió cuando el VAR decidió revisar una jugada que se presumía podría resultar en penalti a favor de Olympiacos, debido a una mano de Eric García. Sin embargo, en medio de esa revisión, el equipo griego logró un gol, lo que complicó aún más la decisión arbitral y generó confusiones en el reglamento aplicable.
En el minuto 57, llegó una decisión que encendió aún más los ánimos: Hezze, futbolista de Olympiacos, recibió una segunda tarjeta amarilla por una falta que muchos consideraron leve. Esta acción, que resultó en la expulsión del jugador griego, fue vista como un error directo del árbitro, quien, con esta decisión, alteró el flujo del partido a favor del equipo español.
Más adelante, en el minuto 65, una caída de Rashford ante el portero rival terminó en un penalti señalado por el VAR, a pesar de que muchos criticaron la naturaleza de la jugada, argumentando que el delantero se dejó caer en un intento de engañar al árbitro. Esta controversia suscitó un debate sobre la integridad de las decisiones arbitrales en partidos de alta tensión.
En otro encuentro destacado, el Arsenal también enfrentó críticas por decisiones arbitrales en su partido contra el Atlético. Un gol del Arsenal, que provino de un saque de falta, fue objeto de discusión ya que se sancionó un contacto que, según varios analistas, había ocurrido al revés.
A medida que las ligas avanzan, es evidente que la confianza en los árbitros se convierte en un tema central. La tecnología VAR ha introducido una nueva capa de complejidad, pero también ha resaltado la importancia de la interpretación adecuada de las reglas del juego, que puede ser decisiva en el desenlace de los partidos. A pesar de las controversias, el fútbol sigue brindando emociones intensas y historias que mantener a los aficionados al borde de sus asientos.