El FC Barcelona reafirmó su dominio en el fútbol femenino al vencer al Real Madrid 4-0 en un emocionante clásico disputado en el Estadi Olímpic Lluís Companys, donde 36,276 aficionados se dieron cita para presenciar el partido. Esta victoria no solo detuvo las esperanzas de aquellos que pensaban que los duelos entre estos dos equipos se habían equilibrado, sino que también demostró que, a pesar de un cambio reciente de entrenador y la competencia del rival, el Barça sigue siendo el claro favorito en este enfrentamiento.
El encuentro comenzó de manera electrizante, con ambas escuadras generando ocasiones desde el primer minuto. Sin embargo, fue la delantera polaca, Pajor, quien abrió el marcador a los 15 minutos al aprovechar un centro peligroso desde la izquierda. Su segundo gol llegó cuatro minutos más tarde, aunque una revisión del VAR resultó en su anulación, a pesar de las evidencias de la repetición que mostraban que no había falta. Este momento de controversia fue parte de una historia más amplia en un partido lleno de decisiones arbitrales.
Ambos equipos lucharon intensamente, y a pesar de la ventaja inicial del Barça, el Real Madrid también tuvo sus oportunidades, pero no supo capitalizarlas. La portera del Barça, Cata Coll, realizó una intervención crucial al detener un mano a mano que pudo cambiar el rumbo del encuentro. A medida que avanzaba el partido, las estrategias de Barcelona se volvieron más sólidas defensivamente, lo que limitó las ocasiones del Madrid y permitió a los azulgranas controlar el ritmo del juego.
El segundo tiempo vio la entrada de Aitana Bonmatí, quien se convirtió en la jugadora con más clásicos disputados en la historia, recibiendo una gran ovación del público. Con la llegada de Aitana, el Barça controló aún más el balón y, a pesar de que el Madrid presentó un esfuerzo por levantarse, la suerte no estuvo de su lado.
La situación se volvió tensa cuando se sancionó un penalti a favor del Madrid, pero Cata Coll detuvo el lanzamiento de Weir, manteniendo intacta la ventaja. Para agregar más al drama, hubo un intercambio de expulsiones en los banquillos tras un altercado, lo que solo incrementó la intensidad del juego.
Finalmente, el Barcelona finalizaría el encuentro con dos goles más en tiempo añadido, uno de Sydney Schertenleib y otro de Aitana, quien selló la victoria con un espectacular triangulación en el área. El triunfo del Barça no solo reafirma su posición como el mejor equipo en la actualidad, sino que también augura un futuro brillante en la competición, especialmente con un enfrentamiento próximo en Stamford Bridge que se anticipa como crucial en su camino por el éxito este año. La afición del Barça puede sentirse optimista de cara al futuro, ya que el equipo ha demostrado su talento y resiliencia frente a la adversidad.